Hay ocasiones en las que la distancia entre pared y ventana impide que se puedan instalar ciertos modelos de cortinas o estores. Por suerte, disponemos de otras opciones de enrollables para poner en carpintería. Eso es lo que debemos saber acerca de ellas. En especial, nos detenemos en el Store Glass, una solución distinta que supone una optimización total del espacio.
Como arquitecto o profesional de las reformas seguro que te has encontrado en más de una ocasión con esta circunstancia, la petición de un cliente que quiere instalar una protección solar en un punto donde no hay espacio suficiente entre el marco y la ventana. Por eso, te interesa especialmente tomar nota de los enrollables para poner en carpintería que te ofrecen respuestas a circunstancias difíciles.
Cómo suelen ser los enrollables para poner en carpintería
En más de una ocasión nos hemos hecho eco de una realidad, la escasez de metros disponibles hace que nuestras viviendas, locales comerciales o centros de trabajo sean cada vez de dimensiones más pequeñas. Lo que hace imprescindible que aprovechemos el espacio disponible al máximo. Y que haya que buscar fórmulas para compaginar esa carencia con la necesidad de instalar sistemas de protección solar que mejoren el aislamiento térmico y permitan graduar la luz natural. Así que, ¡fuera esos tambores que eran necesarios para recoger las cortinas hace no tantos años!
Es fácil comprobar cómo esta evolución es más que evidente en los nuevos modelos de enrollables para poner en carpintería. Existen soluciones de instalación en el hueco de la ventana o sobre la fachada en los enrollables de exterior, con perfiles en redondo o cuadrado de distintas medidas. Y, para los enrollables de interior, los cajones que se colocan en la parte superior son de forma curva o recta y con varias opciones de tamaño.
Las ventajas del Store Glass
Sin embargo, esta reducción de las medidas no siempre permite la instalación en aquellas ventanas donde no hay ni ese mínimo espacio. ¿Existen enrollables para poner en carpintería en esas condiciones? Afortunadamente, podemos dar una respuesta afirmativa. Porque, el Store Glass se integra perfectamente sobre la ventana, lo que supone una total optimización del espacio disponible.
Si por algo destaca este novedoso sistema es por lo práctico que resulta. Su estructura básica consiste en un cajón redondeado que se instala en la parte superior de la ventana y unas guías laterales, con forma de L. Estas guías van directamente adheridas al perfil de la carpintería. Pero, incluso si no se pueden colocar en el techo, es posible instalarlos sobre el junquillo.
No es su única ventaja. Estéticamente el resultado es impresionante y, como permite todo tipo de tejidos, es útil para esa ventana en la que no hay persiana exterior. Si se elige un tejido opaco, la protección solar alcanza hasta un 97%.
Si hay algo que nos define como empresa es nuestro compromiso con el cliente. En Gravent encontramos soluciones eficaces que resuelven problemas como la falta de espacio. Porque lo importante es que pongas un sistema de protección solar allí donde lo necesitas.
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